Vol. 11/ Núm. 1 2024 pág. 276
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La infraestructura sostenible básicamente hace referencia a proyectos que a largo plazo
dentro de su ciclo de vida deben ser eficientemente planificados, bien diseñados, construidos,
operados y finalmente al momento del proceso para desmantelar aseguren en todo momento la
sostenibilidad económica, social y ambiental con el objetivo de incluir la resiliencia climática e
institucional (Cantú Martínez, 2014).
Para el año 2019 el 75% de los fondos aprobados por organismos financieros
multilaterales se enfocaron en proyectos de mitigación, mientras que el 24% se enfocó en la
adaptación. Este financiamiento sirvió para evitar pérdidas económicas globales ocasionados por
desastres climáticos, dicha pérdida fue valorada aproximadamente en ciento veinticinco mil
billones de dólares. Es fundamental tener a consideración que además del valor económico, se
deben implementar proyectos de infraestructura verde urbana (IVU), sin embargo, eso requiere la
colaboración de varias autoridades a nivel local de cada país (CEPAL, 2019).
Existe un ejemplo común, como manejar el sistema de drenaje eficientemente de aguas
pluviales, donde se necesita la cooperación entre gobiernos locales, regionales y el gobierno
central, en conjunto con ministerios “medio ambiente, agricultura, finanzas, entre otros), con el
objetivo de unificar y coordinar esfuerzos, sin embargo, eso resulta muchas veces conflictos de
intereses, por lo tanto, el trabajo no coordinado provoca vulnerabilidad en las ciudades ante el
cambio climático (CEPAL, 2019).
Impacto de la infraestructura verde urbana en espacios educativos
Es fundamental determinar el impacto de la infraestructura verde urbana en los espacios
educativos en niños, jóvenes y adultos, es decir, en todos los niveles que conformar el sistema de
educación de un país, tomando a consideración que una población puede estar expuesto a
beneficios y problemáticas ambientales de manera desigual (CAF, 2016).
Para los estudiantes y amantes de la lectura el lugar donde estudias no afecta
significativamente el proceso de enseñanza-aprendizaje, ya que, lo esencial es la concentración
en el contenido de la lectura independientemente del entorno físico, sin embargo, si se traslada
eso a la economía positiva, ese pensamiento dentro de los centros educativos carece de
objetividad, ya que, está comprobado que contar con una infraestructura adecuada y espacios de
aprendizaje óptimos suele ser determinantes para que los educandos obtengan resultados
académicos satisfactorios (Castro Pérez & Morales Ramírez, 2015).
Una infraestructura educativa bien equipada y armonizada con la naturaleza, promueve
la disminución de la deserción escolar, además genera una motivación intrínseca en el proceso
enseñanza aprendizaje, tanto entre educandos como educadores, por lo tanto, las inversiones en
infraestructura juegan un rol crucial en abordar los desafíos de acceso y mejorar los resultados en